Fin de semana muy significativo en los Test de otoño. Los partidos internacionales confirmaron la pujanza de los equipos europeos del Tier 2, que lograron magníficos resultados ante selecciones de primer rango. Además, también hubo enfrentamientos directos en el grupo de las Home Unions que aclararon aún más la situación real de cara al Mundial de Japón.
En el grupo de los candidatos a pelear por el Mundial había un partido que destacaba por encima de los demás. La revancha del partido del Mundial de 2015 entre ingleses y australianos. En aquella ocasión la victoria aussie fue incontestable, tanto como en esta ocasión la inglesa. El 30-6 evidencia el crecimiento del XV de la Rosa desde que Eddie Jones se ha hecho cargo del equipo. Después del partido el seleccionador fue claro: «Ahora solo falta armar un grupo de 31 hombres capaces de ganar el Mundial». Fuera las caretas.
Los All Blacks siguen ganando partidos en Escocia con el cuchillo acariciándoles el gaznate. Esta vez fue 17-22 y volvieron a desplegar su maravilloso juego de contragolpe con McKenzie y Barrett reciclando balones como los ángeles. Escocia progresa adecuadamente, pero le falta estar en estado de gracia, ahora que Towsend apuesta por madurar el flair scotish.
Irlanda se dejó ir y a punto estuvo de tropezar ante los fijianos (23-20), mientras Sudáfrica ganaba un duelo de urgencias en Paris a una Francia sin plan de juego. Solo los fallos en el pateo de Pollard mantuvieron en el partido a los del gallo que rozaron la gesta con el ensayo de Serin, que había visitado el sin bin segundos antes (17-18). Victoria necesaria de los Pumas en Italia (15-31) y muy solvente de Japón ante Tonga (39-6) que confirma a los nipones como una selección de clase media.
La noticia del día estuvo a punto de producirse en el Principality de Cardiff, donde Gales doblegó a Georgia (13-6) y en la última jugada del partido realizó una maniobra poco clara con un pilier para no disputar una comprometida melé a cinco metros de su zona de marca y no ser laminada por el scrum de los georgianos. Georgia sigue reclamando su inclusión en el VI Naciones a golpe de buenas actuaciones y los galeses tienen en su banquillo a un histriónico Gatland que se está mourinhizando.
Si buena fue la actuación de los georgianos, mejor fue la de Rumanía, rival de España en la lucha por entrar en el Mundial. Los rumanos tumbaron a Samoa, selección que espera en la repesca al segundo clasificado del grupo de Europa, en un partido vibrante en el que impusieron su tonelaje y su juego cerrado (17-13). Mientras esto ocurría, España caía ante Canadá fruto de sus porpios errores (27-37) y los brasileños, rivales de los Leones en La Vila este sábado, doblegaban a la rocosa Bélgica (19-23). La victoria de EEUU en Alemania (17-46) y el triunfo de los uruguayos en Namibia (36-52) cerraron el panel de resultados.
Sunwolves
21 noviembre, 2017 en 3:16 pm
Que bueno es que el hueco entre tier 1 y tier 2 se vaya estrechando, y nosotros debemos de estar ahí.
Javier Bonilla
22 noviembre, 2017 en 12:32 pm
Inglaterra en estos 2 partidos me ha parecido muy aburrida y plana, tiene que mejorar mucho para ganar ese Mundial si tiene que enfrentarse a los All blacks. Del resto de selecciones solo se salva Irlanda que nunca decepciona.