Último partido del curso de División de Honor 2020-2021. Los dos mejores equipos del año: Lexus Alcobendas y VRAC Quesos Entrepinares se miden en la gran Final de División de Honor este domingo en Las Terrazas a las 12:30 en un partido que dirigirá el Sr. Iñigo Atorrasagasti. En el año del COVID los de Inchausti buscan el trono del VRAC que ha dominado la competición en la última década con 8 títulos.
Ambos equipos llegan a la final en situaciones diferentes. El Lexus Alcobendas ha ganado todos sus partidos de la segunda vuelta de la Liga, estuvo exento de jugar los cuartos de final ante el Ciencias por los casos de coronavirus en el equipo sevillano, y lograban una contundente victoria en semis ante el Barça Rugbi. Los granates no pierden desde la última jornada de la primera vuelta cuando lo hacían 16-10 en Altamira ante AMPO Ordizia. El VRAC por su parte encajó dos derrotas en la segunda vuelta – también ante Ordizia y ante el que será su rival el domingo en la Final – y luego ha pasado con muchos apuros las dos eliminatorias del play-off. Taibo les dio el pase en cuartos ante Cisneros con un drop salvador en la última jugada, y ante El Salvador defendieron en línea de 5 metros su pase a la final.
Claves de la Final
La temporada pese a contar con menos jornadas ha sido muy exigente. Convivir con el COVID, el calendario internacional y otros factores ajenos al deporte como Filomena han hecho que se alargue mucho. Todo esto ha afectado físicamente a los equipos que llegan con el tanque de gasolina justo. Es por eso una de las principales claves del partido va a ser la exigencia física. El VRAC – muy golpeado por las lesiones, sobre todo delante – ha dado síntomas de fatiga en sus dos partidos de play-off. Sin embargo Alcobendas – sobre todo ante el Barça – ha dado muestras de tener algo más de aire en sus pulmones y más fuerza física. Muchos podrán pensar que el partido que no han jugado en cuartos de final les habrá ayudado y que parten con ventaja ante el VRAC, pero el VRAC tampoco tuvo que jugar partido de semifinales de Copa en el que los madrileños hicieron un gran desgaste con sus vecinos chamizos. Además el calor – se esperan temperaturas que ronden los 30ºC – puede mermar también el aspecto físico de los equipos.
Si el físico es importante, la cabeza puede serlo aún más. Si hay un equipo que sabe competir en el Rugby Español es el VRAC. Los de Merino son un equipo con ADN competitivo y siempre que llegan los momentos clave sacan su mejor versión. Los datos no mienten y desde que se celebra la División de Honor bajo este formato de play-off, siempre han estado en la Final. La del domingo será la 10ª final consecutiva de los vallisoletanos y en tan solo una ocasión claudicaron en el último partido. Saber gestionar la presión será otra de las claves. Ahí la inexperiencia del Lexus Alcobendas – pese a que ha estado en las dos últimas finales de Copa – puede ser un factor determinante. Es la primera final para los de Inchausti y deberán lidiar con esa ansiedad.
Será clave también el ¿Dónde? Por primera vez la Final no se jugará en Valladolid. Las Terrazas será el escenario lo que limita mucho que haya una gran afluencia de público por las medidas sanitarias contra pandemia. Pese a que el VRAC no notará mucha presión de la grada si es cierto que jugar en campo y en una superficie de césped artificial le da ventaja a Alcobendas que está más acostumbrado a ella.
Ambos equipos llegan con ausencias de mucho peso. Las lesiones han mermado mucho el potencial del VRAC – sobre todo en primera línea – donde hombres como Alberto Blanco, Pablo César Gutiérrez, Alberto Pisulla o José Díaz han provocado que tengan que llamar a filas a un histórico como Pacote Blanco. Fontana y Viano tendrán un duro trabajo por delante en las fases estáticas y mucho minutos ante la que es la mejor rotación de la competición en primera línea con hombres como: Villegas, España, Van den Berg, Ovejero, Fuente, el León Domínguez y el Leoncito Aranda. El que domine la melé es muy probable que domine el territorio. Habrá que ver cómo recompone líneas Merino y si podrá contar con Calzón y Valentín-Gamazo que salieron tocados del partido de semis. Alcobendas ha tenido menos lesiones durante el año. Prácticamente acumularon todas en la primera vuelta coincidiendo con al derrota que sufrieron en San Amaro ante el UBU. Salvo la lesión de larga duración del «Diablo Negro» Montoisy que ha estado fuera todo el curso, han salido bastante airosos. Tampoco estará Foulds, fuera de la disciplina del club desde precisamente el último duelo ante el VRAC. La gran baja de Alcobendas será sin duda la Agustín Schab. El octavo granate se perderá la final por acumulación de amarillas lo que obligará a Inchausti a hacer variaciones en sus esquemas.
Esto nos lleva a la touche. Muchos recordamos cómo Alcobendas fracasaba estrepitosamente en partidos claves desde el lateral. Parece que aquí las tornas han cambiado y que Alcobendas ha solucionado esta temporada sus problemas en esta fase de conquista, mientras que el VRAC ha tenido muchos problemas toda la temporada.
Otro factor clave será la disciplina. No nos olvidemos que esto es una final y que cada punto vale oro. Taibo y López han demostrado durante todo el curso que si les das opciones de puntuar su pierna responde. Capaces de anotar desde posiciones lejanas y complicadas, ambos equipos son peligrosos si les concedes golpes de castigo.
Precedentes
Las dos veces que granates y queseros se han cruzado esta temporada en las dos ocasiones ganaron los madrileños. En la primera vuelta los de Inchausti ganaban en Pepe Rojo 19-20 – y dejaban fuera de la Copa al VRAC – y en la segunda lo hicieron con solvencia por 33-11.
Los Técnicos
José Ignacio Inchausti, se muestra prudente: “Es un rival muy potente, un auténtico equipazo. Estamos preparados para ver la mejor versión del Vrac, que tiene mucha experiencia en finales. Pero si mantenemos nuestro nivel de juego, como demostramos ante el Barça Rugbi, aspiramos a lo máximo”.
Inchausti también se aferra al factor cancha: “La familia granate tiene que ser decisiva. Nuestra afición tiene que ser un jugador más. Hay que salir con 16 jugadores a la cancha. Hemos esperado este partido toda la temporada, nos hemos merecido llegar hasta aquí y ahora hay que disfrutarlo minuto a minuto, es algo único”.
Diego Merino explicó las dificultades que ha tenido una temporada diferente a las anteriores. “Ha sido atípica. Competición diferente, entrenamientos diferentes…y ahora una final fuera de casa en la que no somos favoritos. Para nosotros es un reto, todos los factores nos motivan”. Merino tuvo muy buenas palabras para el rival, al que respeta pero no teme. “Alcobendas se ha adaptado mejor a las circunstancias, pero somos un equipo campeón”. El técnico del VRAC espera a los suyos muy metidos. “La concentración y la actitud son mucho en estos partidos y creo que podemos dar más. Nosotros debemos volver a lo que somos y esa es la mayor sorpresa que podemos dar”.
Final por todo lo alto. El aspirante: Lexus Alcobendas, busca el trono del campeón: VRAC Quesos Entrepinares.