Así se vive una jornada de las Series Mundiales de Seven
Olvidaos de cualquier evento de rugby que hayáis ido a ver a cualquier parte del mundo. Las Series Mundiales son otra cosa totalmente distinta. Aficionados de todos los países en una perfecta comunión con un único objetivo, pasarlo bien y disfrutar del rugby.
Llegamos a Twickenham pegados de tiempo, como buenos españoles, justo para ver a los Leones ante Estados Unidos. Sabíamos que la cosa estaría difícil, los nuestros velan armas de cara a un europeo y un preolímpico que se complica por momentos, y esperábamos una derrota ante los americanos que están a otro nivel. De hecho, terminaron terceros en el torneo y están peleándose con Fiji por la clasificación final de las Series Mundiales que se decidirá en París.
Una vez visto el primer partido salimos a vivir el ambiente que se cuece en estas World Series. No os engañaremos, por la mañana poca cosa. Los aficionados van llegando a la estación de tren de Twickenham de forma muy escalonada, sin prisas ni siquiera por ver a su equipo. Pero el ambiente se va caldeando según se acercan las horas centrales del día y explota a las 12:00 horas, cuando los bares ya tienen permitido vender cerveza. Desde ahí hasta las 17:00 horas, cierre de las persianas de los bares, el ambiente es tremendo. Aficionados de todos los países con ganas de conocer gente y pasarlo en grande. Los partidos son solo una excusa para pasarlo bien, pero si quieres disfrutar del ambiente y ver el juego hay pantallas por todo el estadio para que no te pierdas nada.
Por nuestra parte, visita obligada al verde en los partidos de España, Fiji y Francia pero, en el resto, a conocer gente, tomar unas pintas y escuchar música en directo mientras no perdíamos detalle del torneo en los monitores. Las Series Mundiales devoran a cualquiera, es imposible centrarte en los partidos y evadirte del ambiente que se genera alrededor, es sin duda el evento lúdico del rugby mundial algo
para disfrutar a cada minuto y algo que todos los buenos aficionados del rugby deberían vivir.
Tras un mal día de España quisimos hablar con los jugadores, Iñaki Mateu y Jaime Mata fueron nuestra opción, dos de los jóvenes que terminaron subcampeones del World Trophy y que están llamados a ser el futuro de nuestro rugby. No estaban contentos con el juego pero si con una afición española que, sin desplazarse masivamente, tiene a Londres como su destino de referencia.
Pero lo mejor para que sepáis como se vive como aficionado en las Series Mundiales es que veáis nuestro vídeo. Es solo una recopilación de las imágenes más chulas que nos hemos encontrado este fin de semana. Y, de verdad, en serio, si así es Londres no queremos imaginar
lo que pueden ser Las Vegas o Hong Kong.
PD: El vídeo no es apto para técnicos de sonido, pero amor significa no decir nunca lo siento, y yo os amo a todos por igual.
