La Selección española femenina se confirma como uno de los mejores equipos del mundo tras imponerse a Escocia 29-24 en un Central con casi 4000 personas arropándolas, y da un golpe en la mesa de cara a la clasificación al Mundial de Nueva Zelanda 2021. En un partido apasionante en el que reinó la igualdad, y se sucedieron buenos momentos para ambos equipos, el aguante de las nuestras en la segunda mitad fue clave para conseguir la ansiada victoria.
Las mujeres de José Antonio Barrio saltaron con mucha fuerza al campo, y en los primeros compases consiguieron parar varias envestidas escocesas y tras recuperar el balón protagonizaron varias buenas internadas, que culminaron con un ensayo de María Losada para poner a las nuestras por encima en el marcador en el minuto 6. Desde ese momento la posesión fue para las del cardo, que avanzaron metro a metro con seguridad dirigidas por su poderosa delantera y terminaron poniéndose por delante gracias a Helen Nelson, que además anotó la transformación para las suyas. España, ahora por detrás en el luminoso 5-7 siguió sufriendo sin el balón, y a pesar de la buena defensa que las leonas imprimían y la presión, Hannah Smith, la segundo centro escocesa, volvió a notar tras varias fases de delantera que hicieron que las nuestras se agrupasen y apareciese fuera un hueco, por el que la potente jugadora entró sin problemas en nuestra zona de marca.
En la segunda mitad las escocesas rápidamente consiguieron entrar en la 22 española, y tras recuperar el balón de una patada que no salió por la zona de touch, y recogió la peligrosa zaguero visitante, esta abrió toda la línea para que Hanna Smith de nuevo pusiera la mayor diferencia en el marcador, liderando 10-17. Sin embargo en cuanto España recuperó la posesión llegó la respuesta, con una de las mejores jugadas del partido en la que Saioa Jaurena rompía la defensa y un certero apoyo de Laura Delgada ponía el empate y la máxima emoción a quince minutos del final. Los últimos 20 de la segunda mitad fueron de color rojo, en el 66 Patricia García con una de sus típicas jugadas de picaresca aprovechaba un golpe a cinco metros para sacar rápido y ensayar dejando congelada a la defensa escocesa, y sólo dos minutos después se reafirmaba con otra marca con una carrera en el ala en la que ninguna jugadora fue capaz de pararle, aumentando la distancia en el marcador que, ni siquiera un ensayo tardío de las de Shade Munro consiguió empañar, y se cerró a favor de las españolas 29-24.