Durante la tarde-noche de hoy se ha celebrado en Poznan, Polonia, la reunión de la Comisión de Designación de Arbitraje de Rugby Europe para analizar lo ocurrido en el partido del pasado domingo entre Bélgica y España. La misma comisión que designó al rumano Vlad Iordachescu para dirigir el encuentro entre belgas y españoles, aún a sabiendas de que españoles y rumanos estaban jugándose la plaza directa para el Mundial.
Después de la misma se ha hecho público un comunicado que confirma las informaciones publicadas en 22 en las últimas horas. World Rugby se hace cargo del asunto y ha pedido el informe de lo acontecido a Rugby Europe, tanto l del árbitro Vlad Irodachescu, como el del Match Comissiones, Michel Arpaillange. No habrá comunicación en las próximas horas y el próximo lunes se celebrará una Conference Call decisiva para la resolución de este asunto.

Comunicado de Rugby Europe.
Según ha podido saber este medio, no se contempla la repetición del partido y las decisiones del ente mundial serán ejemplarizantes, tanto para Rugby Europe como para las sanciones a los jugadores españoles.
El Comité, que no es tal porque todas las decisiones las toma su presidente, Patrick Roben, está formado por el francés y tres miembros más Michel Lamoulie, Johan Meersman y Domenico Sironi. A esos tres se sumaban el director de competición de Rugby Europe y Match Comissioner del partido, Michel Arpaillange, y el secretario de Rugby Europe, Gilbert Celli.
No se esperaba una resolución inminente ya que en caso de que entiendan que hay algún hecho que deba ser disciplinado tenían que trasladar el asunto al Comité de Disciplina, compuesto por abogados, que será quien haga pública la decisión final. Así que el proceso aún se alargará por unos días. El árbitro ya ha sido enviado a la nevera por la EPCR y se da por hecho que habrá una durísima sanción para los jugadores españoles. En Rugby Europe no contemplan bajo ningún concepto la repetición del partido y World Rugby espera la resolución que tomen para ver si entra de oficio y toma sus propias decisiones. Cosas que hará con toda seguridad.
Mientras esto ocurre, la Federación Española ha hecho públicos los argumentos en los que ha basado la reclamación por el presunto arbitraje intencionadamente parcial del rumano Vlad Iordaschescu en el encuentro Bélgica – España disputado el pasado día 18 de marzo en Bruselas, son los siguientes:
1.- Vulneración del Artículo 2 del Código Ético del Comité Olímpico Internacional (CIO) al no respetarse la imparcialidad, objetividad y independencia en el nombramiento de los tres árbitros del encuentro.
2.- Incumplimiento del Artículo 6 del Código Ético del Comité Olímpico Internacional (CIO) al haber permitido en estos nombramientos de los árbitros rumanos que aflorara un conflicto de intereses ya que si Bélgica ganaba el encuentro se clasificaba Rumania para el Campeonato del Mundo 2019.
3.- Incumplimiento del artículo 6 del Convenio Europeo de Protección de los Derecho Humanos al no haber habido un juez independiente e imparcial en el encuentro. Dos de los tres árbitros tienen vinculación económica y/o salarial con la Federación Rumana de Rugby.
4.- Vulneración de la Regulación 18.1.3 de World Rugby (WR), al poder constituir la actuación del árbitro un claro perjuicio a los intereses e imagen de World Rugby. Este comportamiento está recogido en una prueba documental de video con 19 secuencias de decisiones tomadas por el árbitro que, o bien eran sanciones contra el equipo de España si haber habido infracciones a las reglas del juego o bien eran infracciones del equipo belga que no fueron sancionadas.
Por todo ello, se ha solicitado que un comité independiente de árbitros (no valdrían aquellos que han participado en el nombramiento y designación de los tres árbitros al estar contaminados) revise la actuación arbitral y de acuerdo con la valoración que hagan se decida por el órgano competente volver a disputar el encuentro Bélgica – España.
Edu
24 marzo, 2018 at 5:45 am
Si la resolución final reconoce la irregularidad y deja el resultado (clasificación tras dicha irregularidad de Rumanía) inalterado, se habrá dejado una herida irreparable en los valores deportivos del rugby y los corruptos se habrán salido con la suya.