El milagro de P. Tinto Feijoo – Por David García

Sinceramente hablar de milagro en la gestión de D.Alfonso Feijoo me resulta de lo mas cómico, al estilo Javier Fesser y como mejor lo definiría seria con un “tralarí, tralarí” como en la película El Milagro de P. Tinto”.

Quiero dejar claro que D. Alfonso Feijoo me parece una persona digna de admirar en cuanto a su forma de dar un paso al frente para intentar rearmar lo que parecía estar desarmado. Pero luego ha ido perdiendo toda la credibilidad y tristemente pienso que la culpa ha sido por el asesoramiento que ha recibido. Quizás en breve descubramos la auténtica realidad de cómo estaba FERUGBY y el porqué de esa situación, alguno se quedará asombrado y le tocará tragarse sus palabras.

El caso es que Feijoo entró a la reforma al más puro estilo “Reformas Usillos” y aplicó “si hay que sanear se sanea”, metiendo pico y pala a todos los presupuestos. El donostiarra hace gala en su programa de no haber reducido la nómina de ninguno de los trabajadores de la federación, lo que si que está claro que cadáveres ha dejado por el camino y alguno de gran impacto. No vamos a hablar de su junta directiva que durante tanto tiempo estuvo desmangada y sin criterio alguno, colaboradores y/o asesores que no llegaron al mes en su puesto y bajas en el departamento de comunicación que nunca volvieron a saber suplir.

Cómo en la película, FERUGBY nunca tendrá descendencia a base de “tralarí, tralarí”, porque no hay trabajo real para obtener frutos, los ingresos solo se aumentan gracias a las nuevas concesiones de CSD, COE (a través de ADO) y de los clubes, el crecimiento de la federación en ingresos de patrocinadores privados ha resultado apenas inexistente. Por ejemplo en el año 2019, el crecimiento de ingresos de este tipo no llegó ni al 4%, mientras que en otras federaciones se ha superado el 20%. Este año, viviendo de subvenciones, el recorte que impondrán debido al COVID-19, será importante.

En lo deportivo sólo ha avanzado el XV del León, pero no en las cifras que “el milagro” defiende, es cierto que se ha avanzado en el ranking mundial, pero el último año no fue el mejor de la selección absoluta. Una vez mas, como bien describe en su película Fesser, se dedica a viajar en el tiempo sin criterio alguno, otorgando retos que no corresponden como tal, simplemente son interpretados a su manera.

Me llama mucho la atención cuando hablan de la incorporación de la Casa de S.M el Rey al rugby, como un logro desarrollado desde Ferraz, otra adecuación de la verdad, como los éxitos de la Final del Top14 en Barcelona, las Finales Europeas en Bilbo o el partido en el Wanda Metropolitano, todo iniciativas privadas a las que, lógicamente, la federación solo dio su visto bueno y en algún caso concreto poniendo a la venta las entradas. Cero iniciativa. Casi todas las promociones del rugby en los medios o en el desarrollo del deporte han sido iniciativas particulares, poniendo únicamente la cara y muchas veces ni eso. Recuerdo la final de la Taca Ibérica de hace dos años en Lisboa, ni un solo representante federativo. ¿Y quieren desarrollar los lazos con Portugal y crear ligas comunes? es que mejora incluso la comedia de Fesser.

Y por último, como acaba de hacer unos días, Feijoo ha anunciando un acuerdo con un gran medio audiovisual, que casualidad, como ya hizo la otra vez con Vocento, donde iba a posicionar el rugby en los medios. De momento esta temporada nos dejó sin televisión y en los últimos años ha dado trompicones, dejando grandes heridos que no creo que se vuelvan a apuntar al oval español, cabe especial atención como se ninguneó a Eurosport.

De nuevo son los clubes los que tiran del oval español, haciendo promociones y elevando el numero de fichas, llegando a acuerdos de patrocinios que les hace profesionalizar sus estructuras y plantillas, consiguiendo contratos con medios para promocionar y desde Ferraz una vez mas “tralarí, tralarí”.