Este jueves, 16 de abril, el presidente de la Federación Española de Rugby (FER), Alfonso Feijoo, mantuvo una reunión por videoconferencia con sus homólogos de las federaciones autonómicas. En total, 14 de las 17 que existen y forman el organigrama territorial del rugby español. Un encuentro que discurrió en un tono cordial y con una clara voluntad de colaborar por parte de todos los participantes, lo cual siempre es de agradecer, pero aún más en las difícil situación en la que nos encontramos.
Asistieron de manera telemática Juan Silva (Andalucía), Rafael Parra (Aragón), Alberto Pérez Iglesias (Asturias), Carlos Castellanos (Baleares), Iñaki Marquínez (Cantabria), Fernando Raposo (Castilla y León), Ignasi Planas (Cataluña), acompañado de su gerente, Juan José Hernández, Iñaki Laskurain (Euskadi), Javier Fernández (Galicia), Javier Lorente (Navarra), Jorge Pardo (Madrid), Víctor Serrano (Murcia), José Luis López Pérez (Comunidad Valenciana) y Luis Viñuales, en su caso candidato a delegado de Castilla La Mancha.
También estuvieron presentes Iñaki Vergara, vicepresidente primero de la FER, además el secretario general de la FER, Eliseo Patrón-Costas, y el vocal de la Junta Directiva de la FER y asesor de su presidente, José Manuel Moreno. Excusaron su asistencia Jorge Rodríguez Bustos, presidente de la Federación de Canarias, Laureano J. Álvarez, presidente de la Federación de Ceuta, y Aurora Caprita, secretaria general de la Federación de Extremadura.
Después del saludo del presidente, en primer lugar se habló de la situación actual de las competiciones nacionales tras declararse el estado de alarma como consecuencia de la crisis del coronavirus. Alfonso Feijoo informó que la Comisión Delegada solo tiene potestad para modificar del calendario deportivo y en virtud de ello el aplazamiento de jornadas de las competiciones iniciadas decretando la suspensión temporal de las ligas o la anulación competiciones no iniciadas, tal y como ha hecho.
Sin embargo, explicó que otra cosa diferente es la determinación de cómo se concluyen esas competiciones y sus clasificaciones si no se pudieran terminar. Es por ello que, junto a otras federaciones que se encuentran en la misma situación, se ha solicitado al Consejo Superior de Deportes (CSD) el apoyo legal que sirva para resolver esta situación extraordinaria y que permita evitar potenciales reclamaciones de los clubes que no queden satisfechos con las decisiones que se adopten.