Australia sorprende a los All Blacks en el tercer partido de la Bledisloe (23-18)

Tenía que llegar y llegó. Nueva Zelanda cayó casi un año después de hacerlo en Chicago ante Irlanda. Fue en la Bledisloe Cup, en el tercer partido ante sus vecinos australianos, en un duelo muy reñido con constantes cambios de marcador.

Fue un encuentro muy igualado en el que los visitantes notaron la baja de su estrella, Beauden Barrett, lesionado desde hace dos semanas. El partido, que se jugó en el Suncorp Stadium de Brisbane, terminó el primer tiempo con mínima ventaja kiwi (12-13).

La fuerte presión de los wallabies pasó factura a los kiwis, como en el ensayo de Hodge, que posó la pelota tras una intercepción en un pase de Lima Sopoaga, el apertura que sustituía a Barrett. Además de ese ensayo, los locales sumaron otros de Israel Folau y Marika Koroibete, una conversión de Bernard Foley y dos golpes del propio Hodge. Del lado de Nueva Zelanda sumaron los ensayos de Waisake Naholo y Rieko Ioane, y dos golpes y una conversión de Sapoaga.

Hacía dos años que Australia no ganaba a los All Blacks, cuando ganó en Sidney 27-19, cortando una serie de siete derrotas consecutivas. Un golpe pasado por Hodge sentenció el partido dejando el resultado en 23-18. La Bledisloe Cup ya estaba en manos de los All Blacks ya que habían ganado los dos primeros partidos de esta serie a tres: 34-54 en Sidney y 35-29 en Dunedin.

AUSTRALIA: Israel Folau; Marika Koroibete, Tevita Kuridrani, Kurtley Beale y Reece Hodge, Bernard Foley y Will Genia; Sean McMahon, Michael Hooper y Jack Dempsey, Adam Coleman y Rob Simmons, Sekope Kepu, Tatafu Polota-Nau y Scott Sio.

NUEVA ZELANDA: Damian McKenzie; Waisake Naholo, Ryan Crotty, Sonny Bill Williams y Rieko Ioane, Lima Sopoaga y Aaron Smith; Kieran Read, Sam Cane y Liam Squire; Scott Barrett y Samuel Whitelock, Nepo Laulala, Dane Coles y Kane Hames.