Jornada final en la ventana de otoño marcada por la tremenda paliza de Escocia a Australia, el empate entre japoneses y franceses que deja seriamente tocados a los del XV del gallo y el triunfo de la industrial Irlanda ante los Pumas. Además Nueva Zelanda doblegó a los galeses en Cardiff, Inglaterra a Samoa, Sudáfrica a Italia y los georgianos confirmaron su salto de calidad derrotando por la mínima a Estados Unidos.
Johny Gray carga ante la defensa australiana. / SRU
El 53-24 que los del Cardo endosaron a los wallabies fue el resultado más sorprendente de la jornada. Towsend se ha estrenado ante su selección cumpliendo su promesa de dar espectáculo en este mes de noviembre. Mucho juego a la mano, a campo abierto y descargando la bola siempre antes de caer. El partido estuvo marcado por la tarjeta roja que vio Kepu antes del descanso, cuando los visitantes dominaban 10-12. A partir de ahí se desmelenó Escocia, que posó ocho ensayos. En Cardiff Nueva Zelanda doblegó a Gales volviendo a demostrar que son el mejor equipo del mundo con la pelota en las manos y espacios por delante. La primera mitad se cerró con un resultado muy igualado (11-12), pero en la segunda los All Blacks impusieron su juego a golpe de ensayos (Linert-Brown y dos de Rieko Ioane) para dejar el marcador en 18-33.
Inglaterra ganó un plácido partido a Samoa (48-14), que espera rival en la repesca para el Mundial del grupo europeo, posición que podría ocupar España. El partido fue un festival de ensayos inglés: Mike Brown, Alex Lozowski, Elliot Daly (2), Henry Slade y Semesa Rokoduguni. También ganó con facilidad Sudáfrica a Italia (6-25), vengando la derrota del año pasado. Los sudafricanos laminaron a los transalpinos con su juego físico hasta enterrarlos con los ensayos de Louw, Mbonambi, Venter, Kitshoff y Mostert.
Otro de los partidos de la jornada se jugó en Dublín, donde enemigos irreconciliables como son irlandeses y argentinos se medían en un partido desequilibrado. Los europeos siguen su crecimiento con un rugby industrial en el que el brutal despliegue físico de su tercera rompe los partidos en el breakdown para luego certificarlo por fuera. Ante los Pumas, que homenajearon a sus compatriotas desaparecidos con el submarino, Irlanda tomó rápido la delantera gracias a los golpes de Sexton y una cabalgada de Jacob Stockdale, una de las revelaciones de estos test de otoño.
Al descanso se llegó con 13-0. Otro ensayo de Stockdale, pasado por Sexton dejó en el marcador el 20-0. Algo que hirió el orgullo de los argentinos que sacaron su casta y con un rugby más dinámico lograron posaron tres ensayos (Tuculet, Juan Manuel Leguizamón y Ramiro Moyano) para dejar el marcador en 28-19.
En Francia Japón certificó la crisis galopante del XV del gallo. Cuatro partidos en noviembre, con un balance de tres derrotas y un empate dejan muy tocado a Guy Noves. Los galos vieron cómo se ponían por delante en el marcador los nipones con un ensayo de Horie, aunque al descanso llegaban arriba en el marcador (13-8) tras un ensayo de Slimani. Al regreso de los vestuarios intercambiaron ensayos Lafaele y Trinh-Duc. Ishihara posó el tercer ensayo japonés, que no fue transformado por su pateador y el marcador ya no se movió del empate en los minutos finales. Desolador resultado para los franceses e ilusionante para los nipones, que siguen creciendo en juego y competitividad de cara a su Mundial.
Georgia también confirmó su progresión ganando a otra mundialista, Estados Unidos (21-20), y Tonga y Fiji se deshicieron de Rumanía (20-25) y Canadá (57-17).
